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Viernes, 19 de Octubre de 2007 13:56

Las Universidades de Córdoba y Málaga colaboran en la primera matriz de contabilidad social de Andalucía

G.C. - C.M.
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El catedrático de Economía Agraria de la Universidad de Córdoba Antonio Titos colabora en un proyecto con la Universidad de Málaga para realizar la primera matriz de contabilidad social de Andalucía sobre el año 2005. En este sentido, Titos destaca: "Andalucía será una de las comunidades autónomas pioneras al hacer la matriz de contabilidad, que trata de trabajar la información para saber cómo repercute cada una de las magnitudes económicas en las categorías sociales". El proyecto ha sido promovido por el Instituto de Estadística de Andalucía (IEA) y sus autores esperan poder acabarlo a finales del 2008, aunque para esto tendrán que contar con las tablas de input-output y la contabilidad.

Conocer qué sueldos llegan a los distintos tipos de trabajadores y cómo éstos los gastan o los ahorran, son algunos de los aspectos de este estudio, que determinará la función económica de todos los agentes sociales andaluces. Para lograr este objetivo, los investigadores utilizarán miles de encuestas realiazadas por el IEA y el Instituto Nacional de Estadística (INE), además de los microdatos anónimos facilitados por las administraciones y las instituciones.

Estudio fiable

De este modo, la fase actual del proyecto intenta determinar qué preguntas deben incluir en las encuestas que realizan órganos como el IEA. Antonio Titos apunta: "Sabemos qué hay y adónde queremos llegar. Lo que tenemos que decidir es la metodología". En cuanto a las ventajas de este estudio, el catedrático de economía señala: "Tiene fiabilidad porque se trata de una visión global de la economía. Hay que estudiar parcialmente cada aspecto y luego contrastarlos todos entre sí".

La matriz de contabilidad social incluirá previsiblemente actividades económicas como la agricultura, la pesca, la ganadería, la industria manufacturera, el gas, la electricidad, la construcción, el comercio, la banca, los seguros, los transportes, los servicios a empresas o la administración pública. De este modo, los trabajadores se pueden dividir entre diversas categorías, por ejemplo, dependiendo de su grado de formación, el puesto que ocupen o su sexo.


Los resultados de la matriz de contabilidad social servirán a las administraciones y a distintas instituciones para obtener gran cantidad de información y, entre otros aspectos, se conocerán mejor los efectos multiplicadores, que desencadenan distintos fenómenos en las categorías sociales.

P.C. ( De " Andalucía investiga")