Page 37 - Geopolítica del Mundo Actual. Una Visión Multidisciplinar
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GEOPOLÍTICA DEL MUNDO ACTUAL. UNA VISIÓN MULTIDISCIPLINAR
Cultura de Paz, Conflictos, Educación y Derechos Humanos
La diversidad es una dimensión de lo humano, está inscrita en nuestra condición de personas y constituye su verdadera riqueza. Se trata de un hecho y de un derecho. Todos nacemos en el seno de una tradición cultural, que se ha configurado no en solitario y aisladamente, sino en relación con otras tradiciones, unas veces en diálogo, otras en conflicto. Asimismo, a lo largo de nuestra vida recibi- mos influencias múltiples de nuestro entorno. No existen, por tanto, identidades puras, incontaminadas. La identi- dad se construye en apertura a otras identidades. Nuestra identidad es más bien inter-identidad.
La identidad, afirmaba Zygmunt Bauman, es como un mosaico al que le falta una tesela. Tesis compartida por Charles Taylor, para quien el que yo descubra mi propia identidad no significa que yo la haya elaborado en el aislamiento, sino que la he negociado por medio del diálogo, en parte abierto, en parte interno, con los demás. Por ello, el desarrollo de un ideal de identidad que se genera internamente atribuye una nueva importancia al reconocimiento. Mi propia identidad depende, en forma crucial, de mis relaciones dialógicas con los demás.
Por una parte, cabe decir con Mahatma Gandhi, que “ninguna cultura puede vivir si intenta ser exclusiva”. La razón parece obvia: ninguna cultura tiene el monopolio de la explicación de la realidad. Cada cultura representa sólo su particular interpretación de la realidad, que está condicionada por el contexto social e histórico en que se ubica. Por otra, es necesario reconocer que las culturas no han sido nunca estructuras estáticas, rígidas y monolíti- cas, sino que se han construido en relación multidireccio- nal con otras culturas, unas veces en diálogo, otras en conflicto, y siempre en tensión dinámica.
La humanidad no puede sacrificar la diversidad en aras de la globalización neoliberal, que pretende imponer su hegemonía a través del pensamiento único. Como observa Ramin Jahanbegloo, la alternativa no puede ser otra que el diálogo intercultural que permita incrementar la auto- comprensión colectiva contemporánea y conseguir la solidaridad interhumana.
Pluriverso religioso: identidad, diversidad y transversa- lidad
En el terreno religioso van eliminándose poco a poco las fronteras que a lo lago de milenios y milenios de prehisto- ria y de historia de la humanidad han separado a las religiones y van superándose los antagonismos que las
han enemistado, si bien lentamente y con no pocos retro- cesos. Con frecuencia se transgreden las propias fronteras espirituales y se crean nuevas identidades interreligiosas, se cruzan las fronteras de la propia fe y se entra en territorio ajeno, que termina por convertirse en territorio común de las distintas espiritualidades. Es el fenómeno de la interespiritualidad, que se caracteriza por el cruce, el encuentro y la participación de las ricas experiencias espirituales, rituales, ascéticas y éticas `presentes en los textos y las vivencias de las diferentes tradiciones religio- sas21. Uno de los lugares privilegiados donde tiene lugar este cruce de espiritualidades es la mística o, para ser más precisos, las sabidurías místicas, sean laicas o religiosas, ya que es espontáneamente interespritual por el grado de libertad y de liberación interior que comporta el viaje místico22. La vida mística “nos libera de los obstáculos internos que refrenan nuestra generosidad y disposición para participar de las fuentes místicas de otras tradicio- nes. Beber ese precioso néctar requiere apertura y capaci- dad para asimilar la experiencia profunda de esas tradi- ciones venerables”23.
En este encuentro de espiritualidades se va forjando la amistad entre los miembros de las diferentes religiones, que al decir del actual Dalai Lama está en la base del encuentro entre culturas, el diálogo entre religiones y la construcción de proyectos alternativos de nueva humani- dad. El resultado no puede ser la conversión de los interlo- cutores a otro sistema de creencias o a una espiritualidad distintos de la suya, como tampoco el triunfo de una religión y la destrucción de las otras. Lo expresaba con total nitidez y convicción Swmi Vivekananda en el I Parla- mento de las Religiones del Mundo celebrado en Chicago en 1893: “A quien espera que la unidad (de las religiones y
21 Cf. Wayne Teasdale, Toward a Crhristian Vedanta, Asian Ttrading, Bangalore, 1987; id., “The Interespiritual Age: Practical Mysticism for Third Millenium”:
Jornal of Ecumenical Studies 34/1 (1997); id., “El misticismo como cruce de fronteras últimas: reflexión teológica”: Concilium 280 (1999), pp. 121-126; editor con George Cairns, The Community of Religions.: Voices and mages of the Parliament of the World’s Religions, Continuum, Nueva York, 1996.
22 Desarrollo más ampliamente esta idea en Juan José Tamayo, “La mística como superación de los fundamentalismos”, en Mística y sociedad en diálogo,
edición de Francisco Javier Sánchez Rodríguez, Trotta, Madrid, 2006, pp. 155-180.
23 Cf. Wayne Teasdale, “El misticismo como cure de fronteras últimas: reflexión teológica”, a. c., p. 124.
24 Tomo la cita de Ramin Jahanbegloo, Elogio de la diversidad, Arcadia, Barcelona, 2007, pp. 10-108
25 Cf. Juan Masiá y Kotaró Suzuki, El Dharma y el Espíritu. Conversaciones entre un cristiano y un budista, PPC, Madrid, 2007.
Cátedra Unesco de Resolución de Conflictos
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